Por: Raúl Salazar

Beau is Afraid, dirigida por Ari Aster, es una película que cautiva y perturba al mismo tiempo. El filme nos sumerge en la mente de Beau, un niño de diez años que se enfrenta a sus más profundos miedos y pesadillas. La historia se desarrolla en un pequeño pueblo costero, donde Beau vive con su madre viuda. A medida que la trama avanza, somos testigos de los terrores que acosan al joven protagonista. Se ve perseguido por monstruos y criaturas siniestras que solo existen en su imaginación. La película explora temas como la infancia, el miedo y la pérdida. Presenta una narrativa enigmática y escalofriante en una odisea maratónica de 3 horas.

Una de las fortalezas de Beau is Afraid radica en la dirección de Ari Aster. Al igual que en sus trabajos anteriores, Aster crea una atmósfera opresiva y claustrofóbica. Esto sumerge al espectador en el mundo perturbador de Beau. Utiliza una combinación de imágenes surrealistas, música inquietante y un diseño de sonido impactante para construir una sensación de inseguridad constante. Su estilo absurdo recuerda al estilo de Charlie Kaufman, e incluso tiene cierta dosis de extravagancia del cine de Federico Fellini y la audacia visual de Takashi Miike.

Beau is Afraid, una pesadilla que perturba y cautiva

El joven actor Armen Nahapetian, que interpreta a Beau, cuyo nombre no es muy conocido en la industria, realiza una actuación impresionante. Transmite de manera convincente el miedo y la vulnerabilidad del personaje, capturando la atención del espectador en cada escena. Es un talento prometedor que seguramente será reconocido en futuros proyectos.

En cuanto al guión, Beau is Afraid presenta una estructura narrativa interesante. La trama se desarrolla en tres actos bien definidos. Esto sigue el modelo propuesto por Syd Field en su libro “El manual del guionista”. Cada acto introduce nuevos elementos y desafíos para el protagonista. Esto construye una tensión creciente hasta el clímax final.

La cinematografía de la película es asombrosa. El director de fotografía utiliza una paleta de colores sombríos y una iluminación meticulosa. Esto resalta la atmósfera de miedo y opresión. Además, se hace un uso inteligente de los planos y encuadres para transmitir la perspectiva de Beau y su sensación de vulnerabilidad.

 

Beau is Afraid, una pesadilla que perturba y cautiva

A pesar de las destacadas cualidades de Beau is Afraid, la película no está exenta de algunos aspectos negativos. Uno de ellos es la falta de claridad en ciertos momentos clave de la trama. Si bien la intención de mantener una atmósfera enigmática puede ser apreciada, en ocasiones se vuelve confusa y dificulta la comprensión de ciertos sucesos. Esto puede generar cierta frustración en el espectador que busca una narrativa más cohesiva y lineal.

En cuanto a las curiosidades, destaca el hecho de que Ari Aster se inspiró en los cuentos de horror clásicos para crear la estética visual de la película. También se menciona que el director trabajó estrechamente con un psicólogo infantil para comprender mejor los miedos y las reacciones de los niños en situaciones traumáticas.

Beau is Afraid, una pesadilla que perturba y cautiva

Beau is Afraid es una película que no dejará indiferente a nadie. Ari Aster demuestra una vez más su habilidad para crear atmósferas inquietantes y perturbadoras. Al final, Beau is Afraid se debate entre cautivar y alienar, dejando al espectador atrapado en un mar de oscuridad y ambigüedad psicológica.