Fotos: Alejandra Arteaga
Uno pensaría que un concierto casi vacío es un fracaso, un desangelamiento total. Uno espera que una noche de música sea siempre viva, como el sobado término, que los asistentes se desgañiten al unísono y las multitudes aclamen. El éxito es relativo, lo permanente suele ser más tranquilo y sosegado. Bien cita Dylan que cuando Billie Holiday cantó “strange fruit” nadie aplaudió.
Con un poco menos de drama y ambigüedad, un centenar de entendidos se dieron cita en lo que el pasado sábado 7 de marzo parecía un estadio de proporciones mastodónticas: El Plaza. El objetivo era ver a esos granadinos de culto llamados el Grupo de Expertos Solynieve, que como ya habíamos dicho anteriormente son prominentemente españoles en su sonido, y particularmente granadinos en sus letras.
Granadinos afincados en México, uno que otro fan despistado de Los Planetas, y más medios que público se regaron en la amplia pista para ver de cerca a Jota, Manu Ferrón, Chico Lapido, Miguel López y Antonio Lomas cantar sus canciones, que de 2012 a la fecha ya van siendo bastantes como para sostener un show emotivo de cerca de hora y media.
Estaban los que debían estar, ni uno más, ni uno menos, una diminuta “multitud” dispuesta a dejarse embrujar por el hipismo ibérico de la abridora “Fandango de la Libertad”, para dar paso al resto del setlist, uno por demás equilibrado e inquebrantable: “Pequeños”, “Dime”, Battiato”, “No vuelvo a quedar contigo”, la cual fue una advertencia para que no sea la última vez que este encuentro se da.
El sonido era prístino y las guitarras de “La cultural” sonaban mejor en vivo de lo que pensábamos, emoción arriba del escenario, en donde pese a la pequeña concurrencia, los nervios se percibían. La belleza de ver a unos músicos ya hechos tener sensaciones de unos primerizos que quieren convencer a su público, a base de buenas canciones fue hermosa. Sonrisas por doquier, hermandad de términos, más allá del slang de los granadinos y la incomprensión total de un siempre ambiguo Jota.
Con “Ambición”, “Byrds” y “Mexicana” se dio paso a un valle dentro del setlist, la parte edulcorada, sentimental y tranqui de Los Expertos había llegado. “Perros Muertos”, “No te olvidaré”, “Alegato”, “Ola de calor” y “Misionero de Dios” amarraron los corazones para después alivianarlos a punta de guitarras y jovialidad. El público ya estaba habitando en el bolsillo de “La Cultural”, tomando unos tragos y sonriendo como pocas veces.
Ninguna canción fue totalmente coreada, pero tampoco ignorada. El final se avecinaba y con esa nostálgica premonición llegaron “Nueva reconquista de Granada”, “Colinas Bermejas”, Claro y meridiano”, “Una muerte lenta y dolorosa”, “Vainica”, “Libertad”, “Reina de Inglaterra” y “Podemos”, para rematar con “Merienda”.
Cover italiano de sus influencias, cover argentino improvisado a “Más o menos bien” de El Mató a un Policía Motorizado y una magia que impregnó de sencillez y luz los corazones de los asistentes. Al menos a esa pequeña porción que los ha estado esperando desde hace varios años, a la que le importa sonreír y disfrutar de lo básico, a su ritmo. Gran noche, que como vino se fue.